Los Dioses también saben pecar

En el momento que rapidamente abri la puerta, noté que algo estaba diferente.Algo se habia roto, estaba comenzando; con lo que nunca en mi vida habia visto.Finalmente al abri a puerta, lo vi y el tenia la mirada perdida.Como si su alma estuviera saliendo de su cuerpo, respiro,inhalando los trozos de alma caprichosa y mal educada.
Y yo, continuando con la rutina de cada noche, cerré, prendí la luz.El gran vomito de la puerta llamo mi atención. Observando la pequeña pelicula dirigida por mi imaginación, corria la historia de él, llegando demasiado diferente, con esa sonrisa de complice,perdiendo el equilibrio. con movimientos toscos, tan alejados de lo que representa, y del valor que poco a poco se iba perdiendo en el aire.
Ahora viendolo desde donde me quede, donde el vomito me llamó, lo miro, y rapidamente mi cerebro sabe que es el momento de actuar.
Una cubeta y jabón, el olor puede parecer desagradables para los mas pequeños, ellos al igual que yo no han visto esta situación.Es algo realmente soprendente, al fondo los gritos de una mujer, regañando a esos pequeños, suenan y resuenan.
Al dar el primer paso fuera de la camioneta, sus ojos buscan el piso, pero no los mios.
Me empieza a decir su discurso, que como novela barata y mal echa supongo pasará.
Tan solo puedo contestarle con sonrisas fingidas, y un si cortante, que de alguna manera se da cuenta de su situacion y de la mia. Las cosas dentro de la casa pasan al borde del abismo, pero afortunadamente se puede todavia abusar de la ingenuidad de los pequeños.La mujer sige la corriente del drama, ya estando alterada,de manera seca y cortante; pero mantiene todo de cabeza.Los cuidados en el trayecto de la noche son los mismos manteniendo el ingenuo control dentro del hogar. Al revisar las pertenencias de él, no encuentro la cartera, de momento lo vuelvo a buscar, pero no aparece.Me dirigo rapidamente hacia el le pregunto donde estubo, lugares cerca, y en un arranque de adrenalina, se le dispara el tope de la cordura. Enciende el carro para solo decirme "Abre la puerta...vamos a ese lugar" A lo que yo le contesto con un aire de sorpresa"no estas en condiciones para hacerlo" y el riendose como si fuera un juego:
"Si tus nos vas a llevar a ambos". Sorprendido de su "gran razonamiento" le traigo una camisa y me apuro con la puerta, ya saliendo del hogar, hace rugir el carro como si no hubiera mañana, al subirme noto esa sonrisa de satisfacción, como si el momento de aventura le quitara lo inaccesible al control.La aumentada velocidad me obliga a decirle que pare un poco, regresando sus historias de las veces anteriores que estubo asi, era como darle una inyeccion de juventud, vitalidad y energia, que derrochaba en cada alto o semáforo.Cuando llegamos le dige que esperara, lo mejor era ir yo,debido a su situación.Entre y mi cara conocido hizo brotarle una sonrisa al señor, pero la quito a mi noticia de la cartera, juntos buscamos.Pero no habia nada.Confiado regrese a la camioneta, sabia que su honestidad era uno de sus pilares culturales.Ya en el camino de regreso, la platica sobre ser hombre, asi como futuro lider de una familia era la misma; no chocamos pero si tuvimos un encuentro fuerte con otro carro, lo bueno que los sentidos iban regresando al piloto.Ya estando en casa y al hacer una rapida busqueda debajo del asiento, ahí estaba la condenada!.Una preocupacion menos, ya todo listo para irme a dormir, me pregunto.¿Qué lo llevo a hacer semejante estupidez?!
El tenia un gran puesto en mi corazón, sinceramente yo habia caido en esa misma situación; pero lo que me hace pensar mas es sobre la rutina; es mortal.Deberia erradicarse, aunque claro nunca falta el loco o bestia, quien cambie a su familia, su esposa, sus hijos, por el trabajo o por lo que llena esa sed de poder, y de querer más a cada segundo de obtenerlo.
Toda responsabilidad se liga a un circulo, a una rutina,TODOS sin escepcion, hastas el de los dioses, quienes al ver su obra, acuden al pecado, para tener un poco de felicidad,y dejarse sorprender por que tan buen trabajo y función asignaron a esto llamado pecado.